(Todas las imágenes Copyright Ernesto Blanco Calcagno/www.airpressman.com salvo se indique lo contrario)
El ejercicio aéreo combinado CRUZEX 2024 (Cruzeiro do Sul/Estrella del Sur) tuvo lugar en Brasil, en la Base Aérea de Natal (BANT), ubicada en Parnamirim, estado de Rio Grande do Norte, del 3 al 15 de noviembre. El ejercicio es reconocido como el más destacado y grande ejercicio militar en América Latina y fue organizado y llevado a cabo por la Fuerza Aérea Brasileña (Força Aérea Brasileira – FAB).
En su 9ª edición, el ejercicio reunió a 16 países y aproximadamente 100 aeronaves, con países participando con vectores aéreos, así como también, por primera vez este año, en tareas espaciales, cibernéticas, asesores técnicos y roles de observador. Además del Brasil, las naciones que participaron con escuadrones de vuelo de sus Fuerzas Aéreas fueron Argentina, Chile, Colombia, Estados Unidos, Paraguay, Perú y Portugal. Chile, Colombia, Estados Unidos, Paraguay y Perú proporcionaron personal para tareas espaciales y cibernéticas, y hubo observadores presentes de Sudáfrica, Alemania, Canadá, Ecuador, Francia, Italia y Suecia. Desafortunadamente, Uruguay no pudo participar debido a la falta de aeronaves de combate; fuerza que en eventos anteriores supo participar con aeronaves IA-58A Pucará y A-37B Dragonfly. Además, la demora administrativa – en tiempo de elecciones presidenciales en el país – en autorizar la partida de observadores de la Fuerza Aérea Uruguaya (FAU) que estando prontos a partir, se enteraron de la negativa, dias antes.
¿QUE ES EL CRUZEX?
El Comandante de la BANT, Brigadier del Aire Ricardo Guerra Rezende fue el portavoz de la FAB en una conferencia inicial el 4 de noviembre de 2024. Como piloto de combate y ex comandante de un escuadrón de combate F-5E/F de la FAB, Rezende estuvo acompañado por los jefes de las delegaciones de las fuerzas aéreas de las naciones participantes que contribuyeron aeronaves para las operaciones aéreas. Él declaró que Brasil ha estado preparándose para el CRUZEX, realizando reuniones regulares y consultas con las fuerzas participantes desde agosto de 2022. El plan de este año fue extenso: 1400 horas de tiempo de vuelo planificadas y 800 misiones; permitiendo que el personal militar se entrenara en combate aéreo a través de operaciones combinadas. En estas misiones, diferentes naciones operan en escenarios de conflicto de manera integrada y cooperativa, promoviendo el intercambio de experiencias entre los miembros de las fuerzas aéreas participantes. Esta colaboración internacional subraya la importancia de la cooperación militar en un entorno de amenazas cada vez más complejas. CRUZEX ha sido comandado por la FAB desde 2002 y se considera un gran desafío y oportunidad para el servicio y la nación, para demostrar su preparación. Un aspecto notable del CRUZEX 2024 fue la integración de operaciones cibernéticas, que permitió a los participantes enfrentar amenazas digitales en tiempo real y proteger la infraestructura crítica; destacando la creciente importancia de la defensa cibernética en la guerra moderna.
UBICACIÓN
La selección de la Base Aérea de Natal (BANT) no es casual; originalmente llamado Aeropuerto de Parnamirim, esta instalación tuvo un papel importante durante la Segunda Guerra Mundial como base estratégica para aviones que volaban entre Sudamérica y África Occidental para abastecer a las fuerzas aliadas. Particularmente entre 1943 y 1945, la base fue utilizada conjuntamente por la FAB, las Fuerzas Aéreas del Ejército y la Marina de los Estados Unidos y la Real Fuerza Aérea (Royal Air Force – RAF), así como aerolíneas comerciales que apoyaban el esfuerzo bélico, como Pan Am, TWA y American.
El aeródromo militar compartió algunas de las instalaciones con el Aeropuerto Internacional Augusto Severo hasta 2014, cuando se inauguró un nuevo aeropuerto civil más al norte. Su importancia estratégica sigue siendo relevante, ya que la base sirve como un centro para la defensa aérea y la preparación operativa en la región; estando relativamente cerca de África y el Caribe. Proporciona una plataforma para el entrenamiento, la vigilancia y la preparación para misiones que involucran tanto la defensa nacional como la cooperación internacional. Con las instalaciones siendo totalmente para uso militar, infraestructura perfecta, amplias secciones de espacio aéreo con poco tráfico cerca (las operaciones de vuelo se realizaron en el Polígono Aéreo de Serra do Lajeado; 110 nm al oeste de Natal) y la presencia de aeródromos de alternativa, Natal es el lugar perfecto para el CRUZEX.
GUERRA AÉREA: REGULAR, REGIONAL & LIMITADA
Rezende también indicó que el escenario de guerra de CRUZEX es uno de amenazas simuladas por un adversario contra un país, seguido por la reacción consecuente de una fuerza aliada, para garantizar la protección del espacio aéreo y la soberanía de la nación atacada; y no es una operación de Mantenimiento Paz ni de las Naciones Unidas (ONU). CRUZEX se lleva a cabo como un ejercicio de Guerra Regular o Guerra Convencional, que se caracteriza por confrontaciones directas entre las fuerzas militares convencionales de dos o más estados (Fuerza Azul contra Fuerza Roja), que generalmente involucran ejércitos formalmente organizados y divisiones claras. Es el tipo de conflicto más probable en disputas territoriales o políticas entre naciones con fuerzas armadas tradicionales. La Guerra Regional se refiere a disputas que, aunque potencialmente tienen implicaciones internacionales, están confinadas a una región o área geográfica específica. La Guerra Limitada describe conflictos en los que el uso de la fuerza militar está intencionalmente restringido, con límites claramente definidos establecidos por las partes involucradas. Tales conflictos suelen ser más enfocados, abarcando intervenciones específicas, operaciones militares localizadas o ataques de precisión con municiones inteligentes.
TIPOS DE AERONAVES
La alineación de aeronaves mostró una impresionante diversidad, con reactores y turbohélices de combate, aviones de transporte, aeronaves de Búsqueda y Rescate(Search & Rescue – SAR), aviones de Reabastecimiento en Vuelo(REVO), aeronaves de Contramedidas Electrónicas (Electronic Countermeasures – ECM) y aeronaves de Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento (Intelligence, Surveillance and Reconnaissance – ISR).
Contribuciones de Brasil
Brasil, el país anfitrión, presentó su última adquisición, el Saab JAS 39E Gripen construido en Suecia (designado F-39 por la FAB). Otras contribuciones notables de Brasil incluyeron:
Vectores de Combate: Northrop F-5EM/FM, Embraer A-1A/B (AMX) y A-29B
Aeronaves de Transporte y SAR: Airbus C-295 (designado C-105/SC-105 Amazonas por la FAB)
Aeronaves de Reabastecimiento en Vuelo y ISR: Embraer KC-390 Millennium y E/R-99M
La Marina de Brasil (Marinha do Brasil-MB) también participó con el McDonnell Douglas A-4KU. Estos Skyhawks, originalmente parte de la Fuerza Aérea de Kuwait (A-4M y TA-4J modificados) son designados como AF-1 por la MB. Lo más destacado es que son los últimos A-4 en servicio militar en todo el mundo; ahora que los A-4AR Fightinghawk argentinos están fuera de servicio, aparentemente de manera permanente.
Argentina presentó su avión de fabricación propia el FMA IA-63 Pampa III y un Lockheed KC-130H; Chile, un avión cisterna Boeing KC-135E y los General Dynamics F-16C/D Block 50; Colombia, un Boeing KC-767; Estados Unidos, los McDonnell Douglas F-15C y un Boeing KC-46; Paraguay, los Embraer AT-27 Tucano y un Airbus C-212; Perú, un Korean Aerospace Industries KT-1P y un Lockheed KC-130H; y Portugal, un Embraer KC-390.
OVERVIEW OF CRUZEX 2024 OPERATIONS
El ejercicio CRUZEX 2024 se divide en tres fases, cada una con sus propios objetivos.
Familiarización (FAM): La primera fase incluye vuelos de familiarización para ayudar a las tripulaciones aéreas a adaptarse al Área de Operaciones. Esta fase tiene como objetivo construir conciencia situacional y adaptarse al entorno operativo.
Entrenamiento de Integración de Fuerzas (Force Integration Training – FIT): La segunda fase promueve la integración entre las diversas fuerzas participantes. Introduce misiones enfocadas en tácticas y procedimientos específicos, mejorando la eficiencia y efectividad de las unidades en un entorno de combate.
Operaciones Aéreas Combinadas (Combined Air Operations – COMAO): La fase final incluye vuelos en escenarios preplanificados con múltiples aeronaves. Este es el punto culminante de las actividades de entrenamiento, donde todas las fuerzas coordinan acciones de combate aéreo en un entorno de alta presión. Los escuadrones y aeronaves alternan entre roles de «fuerzas azules» y «fuerzas rojas» en cada misión, creando simulaciones tácticas y misiones desafiantes realizadas por todas las fuerzas aéreas participantes. La fase COMAO requiere que los participantes tengan un alto nivel de organización y habilidad para operar de manera efectiva en un escenario de conflicto, demostrando la importancia de la interoperabilidad para alcanzar objetivos estratégicos.
Los objetivos incluyen fortalecer la capacidad de combate integrada, probar e mejorar las técnicas de coordinación y comunicación – todas las comunicaciones se realizan en inglés – y reforzar la confianza mutua y la comprensión de las tácticas de cada nación; especialmente porque algunas nunca han operado juntas antes. CRUZEX 2024 tiene como objetivo actualizar tácticas, técnicas y procedimientos en operaciones aéreas combinadas, preparando a las fuerzas armadas para escenarios de guerra convencional y desafíos complejos; permitiendo a los participantes contribuir a una respuesta colectiva y coordinada a las amenazas. La importancia del ejercicio en contribuir al orden y la paz globales – las misiones y procedimientos siguen los estándares de la OTAN (Organizacion del Tratado del Atlántico Norte) – así como mantener la soberanía y la integridad territorial de Brasil, fue enfatizada por el Brigadier Rezende.
CYBERSPACE
CRUZEX Cyber-Space es una simulación cibernética innovadora que combina los dominios aéreo y cibernético en un frente de defensa unificado. Su objetivo principal es fortalecer la seguridad de los sistemas de TI críticos que respaldan las operaciones aeroespaciales.
Características clave de CRUZEX Cyber-Space:
Modelo Capture The Flag (CTF): Las fuerzas participantes se involucran en la protección y el ataque a sistemas virtuales, perfeccionando sus habilidades en la guerra cibernética.
Laboratorio de Defensa Cibernética: Los equipos colaboran para abordar las amenazas digitales, identificar vulnerabilidades y responder a los ataques en tiempo real.
Actividades Avanzadas: El análisis de computadoras, la explotación de vulnerabilidades, la criptografía y el análisis de tráfico de red son algunas de las actividades avanzadas que se realizan durante la simulación.
Este enfoque innovador subraya la creciente importancia de la guerra cibernética en los paisajes militares modernos, donde la dominación aérea sola ya no es suficiente. Al integrar las operaciones cibernéticas en el ejercicio, CRUZEX Cyber-Space equipa a las fuerzas participantes para contrarrestar las amenazas emergentes en el dominio cibernético.
La integración de operaciones cibernéticas y aéreas en el entrenamiento militar es verdaderamente innovadora. Al combinar estas dos áreas, las fuerzas militares pueden mejorar su precisión y inteligencia en tiempo real, lo que permite ajustes rápidos de ruta y la identificación de amenazas. Esta sinergia también minimiza el riesgo de fuego amigo y optimiza la asignación de recursos. En la era digital actual, la defensa cibernética es crucial para la seguridad nacional. Esta aproximación innovadora representa una oportunidad significativa para ahorrar recursos, permitiendo que los pilotos y los equipos de seguridad digital enfrenten amenazas simuladas en un entorno virtual. Esto reduce la necesidad de entrenamiento físico costoso, el consumo de combustible y preserva las horas de vuelo de las aeronaves, lo que hace que el uso de recursos sea más eficiente y dirigido.
¡REACTORES!
El ejercicio presentó una amplia gama de aeronaves con una amplia gama de rendimientos y capacidades. La Fuerza Aérea Brasileña (FAB) mostró los atributos de su nuevo caza Gripen en misiones de combate aéreo internacional y hubo un gran interés en observar el rendimiento de esta plataforma poco común, ya que su capacidad operativa aún está en desarrollo. Operado por el Escuadrón «Jaguar» del 1er Grupo de Defensa Aérea en la Base Aérea de Anápolis, cerca de la capital brasileña Brasilia, el Gripen está equipado con sistemas de autodefensa a bordo, incluyendo RWR (Receptor de Advertencia de Radar) IRST (Búsqueda y Seguimiento de Infrarrojos) y MAWS (Sistema de Advertencia de Aproximación de Misiles), que son esenciales para detectar y contrarrestar amenazas. Fue evaluado en operaciones de oposición aérea y demostró su conjunto de habilidades en misiones tácticas avanzadas, realizando funciones ofensivas y defensivas. Siguió la evaluación en la tasa de supervivencia en combate y pruebas como capacidades de reacción rápida y detección de amenazas. Para registrar estos datos, la FAB utilizó recursos del PMA II (Planificación de Misiones Aéreas II); un sistema que permite simular el impacto de las amenazas presentes en el escenario, proporcionando un análisis detallado del rendimiento de cada vector.
Otro punto destacado fue la presencia de los McDonnell Douglas F-15C «Eagle»(Águila) en su primer visita a territorio brasileño. Los cazas de superioridad aérea pertenecen a la 159° Ala de Caza de la Guardia Aérea Nacional de Louisiana (EE.UU.), la misma asentada en la Base de Reserva Conjunta de la Estación Aérea Naval de Nueva Orleans.
La Fuerza Aérea Portuguesa (Força Aérea Portuguesa – FAP) trajo uno de sus recientemente adquiridos aviones de transporte Embraer KC-390, y un piloto femenino de la fuerza, declaró que estaban ansiosas por observar y aprender basándose en cómo la FAB operaba este avión. Para su operación en Portugal se ha formado un nuevo escuadrón (Esquadra 506 – Rinocerontes/ Escuadrón 506 – Rinocerontes) en la Base Aérea n° 11 en Beja para reemplazar sus C-130H. Con el nuevo jet brasileño a ser utilizado en misiones de transporte y combate de incendios, también le permitirá a la FAP realizar misiones de Reabastecimiento en Vuelo (REVO) por primera vez en su historia.
Los aviones de combate fueron empleados para diferentes propósitos, simulando escenarios realistas de combate aéreo, como misiones de defensa aérea, ataque y reconocimiento, actuando a veces en nombre de la fuerza «Azul» (los «buenos chicos») y otras como parte de la fuerza enemiga «Roja», para fortalecer la preparación de todos los participantes.
Los cazas brasileños F-5EM/FM (modernizados de uno y dos asientos Tiger II) fueron asignados para misiones de defensa aérea destacándose por su capacidad para gestionar formaciones tácticas y como Líder del Paquete de Defensa Aérea (Air Defence Package Leader); un papel crítico responsable de liderar y coordinar un grupo («paquete») de aeronaves, asegurando la ejecución efectiva de las misiones de defensa aérea, protegiendo las fuerzas y activos amigos de las amenazas aéreas. El más lento A-1A/B (también modernizado por Embraer en 2013 y curiosamente todas las unidades están a punto de ser retiradas a finales de 2025) diseñado para misiones de ataque y reconocimiento, jugó un papel significativo en el liderazgo táctico como Comandante de Misión en escenarios de Misiones Aéreas Combinadas (Mission Commander in Composite Air Mission scenarios)
El F-15C Eagle de EE. UU. actuó principalmente como escolta de los «Paquetes de Ataque» (“Strike Packs”), a menudo liderados por los F-16 de la Fuerza Aérea de Chile (Fuerza Aérea Chilena – FaCh). Curiosamente, el F-15C con número de serie 85-102 (entregado en 1986) poseé tres derribos confirmados en combate aire-aire durante la primera Guerra del Golfo de 1991 (dos Su-22 de la Fuerza Aérea Iraquí y así como un MiG-23). El desempeño impresionante del F-15C es un testimonio de su diseño como un caza de superioridad aérea dedicado. Con sus dos motores y una relación empuje-peso cerca de 1:1, el F-15C sobresale en maniobrabilidad y velocidad, lo que lo hace ideal como escolta para los paquetes de ataque.
El F-15C con número de cola 85-102 tiene un impresionante historial de combate, con tres muertes confirmadas en combate aire-aire. A continuación, se presentan los tipos de aeronaves que derribó:
Su-22: El 7 de febrero de 1991, el Capitán César Rodríguez, volando en el F-15C 85-102, derribó un Su-22 utilizando un misil AIM-7.
MiG-23: El 29 de enero de 1991, el F-15C 85-102, pilotado por el Teniente Coronel Rose, derribó un MiG-23 con un misil AIM-7.
Su-22 (nuevamente): También el 7 de febrero de 1991, el Capitán Murphy, volando en el F-15C 85-102, derribó otro Su-22 utilizando un misil AIM-7.
«SLOW MOVERS» (¡LOS LENTOS!)
Uniendose a los «Slow Movers», el turbohélice de ataque A-29 Super Tucano realizó ataques integrados, ofreciendo un rendimiento versátil al atacar objetivos terrestres con armamento convencional. Junto al A-29 en misiones de ataque al suelo, frecuentemente estaban el IA-63 Pampa III de la Fuerza Aérea Argentina (Fuerza Aérea Argentina – FAA), el KT-1P «Torito» peruano y el T-27 Tucano de la Fuerza Aérea Paraguaya.
REACTORES MULTIMISIÓN Y ¡ESTACIONES DE COMBUSTIBLE AÉREAS!
El FAB Embraer E-99M, recientemente modernizado, es fácilmente identificable por la antena dorsal de su radar Saab Erieye actualizado, que proporciona Alerta Temprana y Control Aéreo (ATCA) o Airborne Early Warning & Control (AEW&C). Junto con la aeronave de detección remota R-99, desempeñaron un papel crucial en el ejercicio, asegurando una coordinación y comunicación eficientes entre los participantes. Con su nuevo sistema de Guerra Electrónica (Electronic Warfare – EW), y de Gestión de Operaciones Centradas en Red(Network Centric Operations Management – NCOM), el E-99M fue responsable de las acciones de Control y Alerta en Vuelo (Controle de Vôo e Alarme – CAV) mientras que el R-99 sirvió como Estación de Comunicación Aeroportada (Posto de Comando e Alerta de Radar – PCOM-AR). Además, el ejercicio incluyó advertencias avanzadas aire-aire, ataques terrestres, reabastecimiento en vuelo, patrullas aéreas de combate, escolta, barrido, carga y lanzamiento de paracaidistas, entre otras acciones destinadas a mejorar las capacidades de combate y penetración.
Otro nuevo tipo de aeronave que todos querían ver fue el Embraer KC-390 Millennium reactor bimotor de transporte multipropósito y Reabastecimiento en Vuelo (REVO), especialmente por su reciente éxito en ventas en el extranjero. Junto con el Airbus C-295 designado por la FAB como C-105 Amazonas, fueron dos de los aviones de transporte de la FAB y un componente esencial del entrenamiento de Aviación de Transporte durante el ejercicio aéreo. El C-105 Amazonas, conocido por su durabilidad y capacidad para aterrizar en pistas de aterrizaje desafiantes, realizó misiones de transporte de tropas y suministros a áreas remotas con lanzamiento de carga, subrayando la importancia de la logística en escenarios de combate y humanitarios.
El KC-390 Millennium de Embraer demostró sus capacidades en reabastecimiento aéreo (REVO) haciendo su debut operativo en estas tareas, equipado con dos pods montados en los extremos exteriores de los planos que forman parte del sistemas de reabastecimiento de tipo «manguera y canasta» (Hose & Drogue). Además de esto, el KC-390 participó en misiones de reabastecimiento aéreo, asalto aéreo, infiltración y exfiltración de tropas, y ayudó a establecer entrenamiento táctico y operativo para el tipo en un escenario de conflicto simulado, demostrando su versatilidad en operaciones multi-escenario, tanto militares como humanitarias.
Es interesante destacar que Embraer y la Fuerza Aérea Brasileña han comenzado estudios para adaptar el C-390 Millennium para misiones de Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento (ISR), centrándose en posibles adaptaciones de la plataforma para estas misiones, y expandiendo el portafolio de soluciones para satisfacer las necesidades operativas. En este sentido, se observó que un KC-390 operaba con un pod de navegación y designación de objetivos Rafael Litening XR de fabricación israelí.
Entre las características que hacen del KC-390 Millennium una plataforma ideal para misiones complejas se encuentran su amplio alcance, capacidad de carga, y posibilidad de portar cargas externas en pilones alares o bajo el fuselaje delantero. Además, su tecnología de punta en comunicación y sistemas de autoprotección lo convierten en una herramienta clave para misiones de alto riesgo.
La Fuerza Aérea Colombiana, la Fuerza Aérea de los Estados Unidos y los aviones cisterna chilenos jugaron un papel crucial en estas operaciones, permitiendo que los aviones de combate ampliaran su alcance y realizaran misiones en áreas remotas. Los controladores de tráfico aéreo (ATC) también desempeñaron un papel vital, coordinando y asegurando la seguridad de las misiones de entrenamiento y la integración compleja de vuelos de diferentes fuerzas aéreas extranjeras, lo que requirió una planificación y ejecución cuidadosas.
El Centro Integrado de Defensa Aérea y Control de Tráfico Aéreo (CINDACTA III) es una unidad militar brasileña con sede en Recife, responsable de garantizar la seguridad operativa y la vigilancia del espacio aéreo en la región. Esta unidad gestiona y controla un vasto área de 13,5 millones de kilómetros cuadrados, que incluye la región noreste de Brasil y una gran parte del Océano Atlántico, siendo el principal centro de control de tráfico aéreo para vuelos entre América del Sur y Europa. Los controladores del CINDACTA III recibieron entrenamiento especializado para familiarizarse con escenarios simulados y desarrollar tácticas de respuesta rápida para situaciones complejas. Además, se utilizaron sistemas de comunicación y vigilancia avanzados para minimizar las interrupciones en las operaciones aéreas, monitoreando los movimientos de los aviones para garantizar una gestión precisa y segura del espacio aéreo. Los controladores también desempeñaron un papel crucial en la vigilancia de escenarios de combate más allá del alcance visual (Beyond Visual Range – BVR) y participaron en briefings y debriefings diarios para revisar tácticas y estrategias.
SEMANA FINAL
En la segunda y última semana del CRUZEX 2024, el entrenamiento se intensificó aún más. El mismo incluyó nuevos escenarios con una mayor complejidad operativa y obstáculos adicionales; con el objetivo de promover el intercambio operativo, enfocándose en la preparación y la interoperabilidad en un entorno de defensa mutua entre las fuerzas aéreas participantes.
En esta etapa, se colocaron limitaciones artificiales en las capacidades de los aviones, obligando a los pilotos a desarrollar soluciones creativas para cumplir con sus misiones. El director del ejercicio explicó que a medida que avanzaba el entrenamiento, la metodología era reducir las capacidades de los aviones, equilibrándolas. Este enfoque permite el desarrollo de competencia doctrinal en escenarios simulados durante el entrenamiento, con el objetivo de imponer un «desequilibrio controlado de fuerzas» que aumenta la complejidad de la misión.
Además, desafió a las tripulaciones aéreas en sus habilidades de planificación y toma de decisiones, ya que los equipos tenían que innovar y adaptarse a situaciones adversas, mejorando sus competencias operativas.
Los observadores de las naciones que no contribuyeron aeronaves, jugaron un papel crucial en este ejercicio, aprendiendo y entendiendo el CRUZEX para brindar retroalimentación a sus respectivas fuerzas aéreas. Con su participación en briefings y debriefings, obtuvieron conocimientos sobre la planificación y ejecución de misiones en un entorno de conflicto simulado.
Además, los observadores siguieron toda la planificación y ejecución de las Operaciones Aéreas Combinadas (COMAO), observaron los vuelos y actividades tácticas desde una distancia segura, obteniendo una visión general de las etapas de entrenamiento, las estrategias y métodos observados durante el ejercicio para fortalecer las capacidades de defensa en sus propias naciones. Al final del ejercicio, cada país observador tuvo la oportunidad de presentar sus impresiones, destacar los aspectos positivos y sugerir mejoras. Este intercambio de conocimientos permitió a todos los involucrados ampliar sus perspectivas y adoptar prácticas más eficientes en futuros entrenamientos y operaciones.
El ejercicio CRUZEX 2024 fue un gran éxito, con 16 países y más de 3.000 militares participando. El evento cumplió su objetivo de mejorar las capacidades de defensa y promover la cooperación internacional entre las fuerzas aéreas. Durante el ejercicio, los participantes completaron más de 800 misiones, incluyendo 1.500 horas de vuelo, 450 saltos de paracaidistas y 160 ataques a objetivos. El ejercicio destacó la importancia de la colaboración y el intercambio de conocimientos entre las fuerzas aéreas para mejorar las respuestas a situaciones del mundo real.
Una característica clave de CRUZEX 2024 fue la integración de operaciones cibernéticas, que permitió a las fuerzas abordar amenazas digitales junto con desafíos físicos. Este enfoque en la guerra tradicional y cibernética subrayó el compromiso con la seguridad global y una mejor coordinación entre las fuerzas aéreas.
Para deleite de la FAB, el ejercicio también demostró que, al operar en misiones grandes y complejas, la efectividad de aviones avanzados como el caza F-39 Gripen, el avión de transporte KC-390 Millennium y los aviones de reconocimiento R-99/E-99, reforzaron las capacidades de las escuadras participantes. Las fuerzas aéreas como la paraguaya, en su primera visita al ejercicio, partieron con un fuerte sentido de propósito y decididas a modificar sus tácticas operativas, seguramente ya pensando en los A-29 Super Tucano que serán incorporados a fines de 2025.
El «poderoso» Super Tucano de la FAB mostró sus capacidades, ya probadas en combate en Afganistán, a un público ansioso de aviación, ya que el turbohélice de ataque brasileño continúa a ser vendido en el extranjero. Durante 2024 su fabricante Embraer anunció ventas de A-29 a Portugal (el modelo A-29N modificado para requerimientos de la OTAN) así como a Paraguay, Uruguay y una nación africana no revelada.
En general, CRUZEX 2024 dejó un fuerte legado de colaboración internacional y aprendizaje, sentando las bases para futuros ejercicios que continuarán fortaleciendo las capacidades aeronáuticas globales.